Virtuosismo. Técnica. Más virtusismo. Más técnica. Músculos, torsos, movimientos, acrobacias, ritmos...cultura. La riqueza de esta cultura y de este tipo de danza. Rozando la danza africana, con una calidad y musicalidad terribles, presumía todo el elenco de una flexibilidad enorme y un deleite de combinaciones rítmicas al lado de los percusionistas que a cualquiera atrapaba. Aunque las viejas dijeran que estaban cansadas de tanto tamborcito.
Después de un descanso de dos euros por una bolsa de patatas en la cafetería, vino la segunda parte y me llevaron de viaje a la verbena de mi pueblo. Hubo de todo, cha cha cha, salsa, mambo... Las viejas de antes estaban ahora contentísimas pero yo no sabía dónde meterme. ¿Pero a qué venía todo eso? ¿Cómo habeis podido hacer esto chicos? Claro que seguía habiendo virtuosismo y técnica pero menudo cambio tan radical. Si no llego a ir acompañada me voy. Que aburrimiento, parecía otra compañía y por supuesto otra función. Si era por completar tiempo a mí no me hubiera sabido a poco la primera parte sin más. Por no hablar de las chicas que cantaron. Ya sé por qué son bailarinas. Madre mía. Qué decepción en esa segunda parte. Tendré que someterme a un lavado de memoria para recordar tan sólo la primera. Ese virtuosismo. Esa técnica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario